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Con la llegada de la crisis, que de momento parece que no se va, irse de vacaciones fuera de España parece una idea cada vez más lejana para muchos, por lo difícil que resulta su mero planteamiento.

Conscientes de este ineludible panorama y, al mismo tiempo, de lo importante que es poder disfrutar de unas jornadas de descanso, te proponemos ir descubriendo distintos lugares de España con nosotros, conociendo así destinos potenciales para esos días tan necesarios.

31 de marzo de 2009

Benidorm, diversión en el Mediterráneo

Benidorm, ciudad turística por excelencia del Mediterráneo, se sitúa en la costa norte de la provincia de Alicante, en la Comunidad Valenciana. Pertenece a la comarca de la Marina Baja, y está separada de Alicante capital por unos 50 kilómetros de distancia. Sus playas y su vida nocturna son famosas, resultando un reclamo magnético para cientos de miles de turistas que visitan la localidad año tras año, tanto en invierno, como en verano; algo sin duda propiciado por las benévolas temperaturas que se mantienen a lo largo de todo el calendario.

Sin embargo, Benidorm también destaca por su oferta en parques temáticos, y si lo que se busca es vivir emociones más intensas durante el día, una visita a alguno de éstos contiene la solución ideal. En Terra Mítica se puede disfrutar de una rotunda descarga de adrenalina en alguna de sus atracciones, mientras se gira boca abajo a cien kilómetros por hora, o se cae 35 segundos en picado.

Pero si las vueltas de 360 grados no son lo suyo, y encima hace calor, ningún problema; el parque acuático Aqualandia ofrece al visitante la oportunidad de deslizarse por una gran variedad de toboganes de distinto grado de emoción, y disfrutar de rápidos, trampolines, y una piscina con olas, entre otros.

Otra posibilidad para ocupar las horas del día en compañía de los más pequeños, es realizar una excursión al parque de animales marinos y exóticos Mundomar, donde podrán admirarse delfines, leones marinos, pingüinos, y otras especies animales.

De noche, Torneo Medieval invita a deleitarse con una cena de época, mientras se es testigo de cómo los caballeros luchan, tanto a pie como a caballo, por defender su honor y no ser lanzados al foso del terror.

Pero después de la cena, la diversión no tiene por qué terminar. Benidorm se ha ganado a pulso la fama como referente en ocio nocturno, y si lo que se desea es experimentar intensamente la vida nocturna de la ciudad, las opciones son infinitas. Desde excelente música en vivo hasta un excitante espectáculo de cabaret, pasando por animados bailes al ritmo marcado por algún dj de renombre en una de sus discotecas, como Pacha, Ku y Space- el viajero encontrará todo esto y más.

Con el nuevo día, llegan los momentos de relajación costera. Las playas de Benidorm cuentan con una magnífica reputación e invitan a abandonarse al calor del sol y al suave mecer de las olas. Dos de las más conocidas son la Playa de Levante y la Playa de Poniente. De arena dorada y forma de media luna, se encuentran entre las mejores de Europa debido a su kilométrica longitud, la calidad de su gestión, y la amplia oferta deportiva que proponen a sus visitantes.

Sin duda, un intenso destino que invita a disfrutar a fondo de todo su potencial. Para ello, sólo es necesario tomarse el tiempo para librarse de la monotonía y vibrar al unísono con este sorprendente lugar. La oferta en hoteles es enorme, y de seguro el viajero encontrará un lugar de alojamiento en perfecta armonía con sus necesidades personales, desde donde poder disfrutar sin límites de sus días de ocio.

Benalmádena: costa y montaña

En la comarca de la Costa del Sol Occidental, dentro de la provincia andaluza de Málaga, encontramos el turístico municipio de Benalmádena. En él, aparecen tres centros urbanos diferenciados, que ofrecen al visitante un amplio abanico de posibilidades para sus días de descanso. El núcleo de montaña, conocido como Benalmádena Pueblo, es donde se encuentra ubicado el Ayuntamiento. Por otra parte, Benalmádena Costa, erigido en torno a la playa, constituye el corazón turístico del municipio. Finalmente, Arroyo de la Miel es el núcleo ubicado entre la costa y la montaña, que debe su desarrollo principalmente a las actividades agropecuarias.

Con una extensa oferta turística en cuanto a hoteles y apartamentos, así como en lo referente a actividades de ocio y recreo, Benalmádena descubre una multitud de puntos de interés a visitar, al igual que una riqueza de deportes a practicar. Algunas de las atracciones a tener en cuenta son el Teleférico, desde donde puede verse el Tivoli World - parque de atracciones más legendario de la Costa del Sol -, al igual que el resto de la ciudad; esto, sin olvidar que el funicular constituye además el único medio para llegar al Jardín de las Águilas.

En lo que se refiere a monumentos, quizás llame especialmente la atención la Estupa Budista, templo budista de interesante arquitectura, único en la Costa del Sol. Para los amantes de la arqueología precolombina, hacer parada en el Museo Arqueológico es una visita de obligado cumplimiento, ya que reúne una importante colección de este tipo de piezas.

En otro orden de cosas, el Puerto Marina, situado en un enclave privilegiado, y considerado uno de los mejores puertos deportivos del mundo, ofrece la posibilidad de realizar agradables paseos recorriendo su extensión, al tiempo que se disfruta de los escaparates de sus tiendas, o se para a repostar fuerzas en alguno de sus restaurantes. Benalmádena cuenta asimismo con dos acuarios, el Sea-Life y el Selwo Marina, donde pueden admirarse muchas especies de animales acuáticos.

También los amantes del deporte están de enhorabuena. Benalmádena brinda muchas posibilidades para practicar deportes de todo tipo, que van desde el golf, con más de una treintena de campos, hasta el piragüismo y otros deportes de agua como la vela. Por supuesto, esto sin olvidar los gratificantes paseos por las más de doce playas que el municipio ofrece, que se suceden a lo largo de unos 20 kilómetros de litoral de forma bastante continuada.